Extraído de: Contrainfo
La madrugada del 7 de diciembre colocamos y activamos un artefacto incendiario, en uno de tantos cajeros automaticos que hay en la ciudad podrida de Tijuana.
El artefacto estaba compuesto por 250 gramos de polvora negra y 250 de Salaz, el paquete fue adeherido a un galon con 8 litros de benzina y con una mecha casera para su activación. Sigue leyendo